jueves, enero 14, 2010

Tiembla la tierra

Empezando el año...
La catástrofe del pasado 12 de Enero en la isla caribeña de Haití, el país más pobre de América Latina, provocó una enorme huella histórica de destrucción.

Un terremoto de 7.0 grados de magnitud, con epicentro en el pueblo de Léogâne, a aproximadamente unos 20 km de Puerto Príncipe, la capital de Haití, presuntamente
generado a 10 km de profundidad. Según registros históricos es el sismo más fuerte desde 1770, cuando otro siniestro de 7.5 grados devastó por completo a la misma ciudad. Se contabilizan más 100 mil muertos y número de damnificados asciendo a 3 millones.
En una nación con varios años en guerrillas, en constantes luchas internas de poder, que acumula un grave resago económico y social, es lamentable que su gente sea víctima de tan atroz suceso. Sin duda, resulta imposible de imaginar un supuesto castigo divino, son personas que por mucho tiempo han sufrido carencias. Es devastador, pobre gente.
Nos corresponde, en lo humanamente posible, ayudar, no solo en lo material, que es importante, también en el aspecto social y educativo, que seguramente estos serán el material más sólido para los cimientos de una más completa reconstrucción del pueblo haitiano.


Foto: insidedisaster.com