Reporte MAY-05
Maratónico, cansado, fatigante, estresante, explosivo, decepcionante, demoníaco aunque satisfactorio resultó ser el transcurrir del diario andar para el alienígena (gracias [otra vez] Nox) autor de estas alucinantes líneas de absurda bloguería a lo largo y ancho de ese mess.
La verdad es que todo comenzaba ser alentador para los entusiastas planes del viajado autor, puesto que su idea de irse de puente con sus tapatíos parientes veíase caer como torres gemelas en 11 de septiembre, sus jefes, orquestadores de tan truculento sabotaje. El macuarro autor tendría que ponerse el overall para hacerla interinamente de pintor, pues su bunker tendría que sufrir una bien merecida remodelación.
No problema, si no se pudo en el puente ¡tendría que ser para el concierto de los White Stripes! ¿Estamos de acuerdo? era lo más justo, luego de las largas jornadas pujantes de sudada cuartomorfosis, cierto es que el laburante autor mereciese pasar a recibir tan distinguido estímulo. Pero, ¿qué pasó? Pues pasó que no pasó nada. Nuevamente vino a ser víctima de un minucioso complot en su contra planeado por las perversas y enfermas mentes dolosas del más allá.
Y sucedió. Los demonios escaparon, y por la puerta grande. Poco se pudo hacer para contenerles. Las secuelas aún no cesan.
No han sido días fáciles para el vertiginoso autor, a pesar de todo, el momentaneo exorcismo le ha dado una anciosa tranquilidad a su ente; quien no lo hubiera podido lograr sin la invaluable ayuda de sus esotéricas amigas Durú, Bellota y Nox. Besos desde el más acá, para todas y cada una de ustedes, para que se los acomoden en el más allá.
Alma, gracias por aparecer en la selénica imaginación del marciano autor (JE, JE Nox), ahora eres una más de sus psicóticos vástagos, la más reciente, la más joven; tu proceso de gestación parece mantenerse en constante transformación, puesto que la turbulenta y mocha colectividad asustase de tu fuerza y repentina presencia, por favor, tenme karmática paciencia, que en estos momentos, yo te poseo a ti, porque tu me posees a mí.
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